Por la Soberanía y la Democracia en Guinea Ecuatorial
África, a pesar de sus enormes riquezas naturales, es un continente saqueado y condenado por el FMI, la UE, las multinacionales y los regímenes dictatoriales a la guerra, el hambre y las epidemias.
Pero esto ha empezado a cambiar, las revoluciones de Túnez, Egipto, etc. traen vientos de libertad y de soberanía a todos los pueblos del continente africano. Estas revoluciones se han desarrollado contra los dictadores amparados y agasajados por los EE UU, la UE y los gobiernos, contra los regímenes dictatoriales a su servicio. Los trabajadores, la juventud y los pueblos, apoyados en sus organizaciones independientes han mostrado el camino a todos: ruptura con la dictadura, abajo el dictador y su régimen. Reclaman un verdadero régimen democrático: una Asamblea Constituyente para que el pueblo decida su futuro soberanamente y no las multinacionales y las instituciones imperialistas.
Guinea Ecuatorial no es una excepción. Macías primero y Obiang después han arruinado la agricultura y la pesca; Obiang en particular ha instaurado un régimen sanguinario de terror en el que la arbitrariedad, el despotismo y el robo a manos llenas de los recursos naturales ha dejado al pueblo en la miseria más absoluta.
En la actualidad, la economía de Guinea se basa en la explotación y el expolio del petróleo por las multinacionales, estadounidenses en su mayoría (ExxonMobil, Amerada Hess, etc.), mientras la familia Obiang saca fuera del país miles de millones de dólares. De seguir esto así, en pocos años, cuando disminuyan las reservas de petróleo, Guinea Ecuatorial será un país totalmente arrasado, escenario propicio para guerras “étnicas” de rapiña.
La Nota Informativa del FMI sobre Guinea Ecuatorial de 2010 constata esta realidad, pero concluye que Guinea Ecuatorial debe reducir su “déficit primario no petrolero”, y afirma: “la carga del ajuste ha de recaer en una racionalización del gasto. (…) El insostenible gasto fiscal (…) podría afectar a la estabilidad de la región (…) es necesario incrementar el ahorro público en la región y adoptar reformas estructurales encaminadas a elevar la productividad”. ¡En un país en el que no existen infraestructuras, en que jóvenes, trabajadores y campesinos no tienen ningún derecho, que carece de educación, de sanidad y del más elemental servicio público! La permanente receta del FMI se dirige a Guinea Ecuatorial, pero también a los países de África Central que comparten moneda, el franco CFA, en particular a Gabón y Camerún. La suerte de Guinea no es independiente de la de los países vecinos con los que ha establecido relaciones económicas y comerciales.
Conscientes de que nada que mejore la situación se puede esperar del FMI, de la Unión Europea, de los EE UU, de la Unión Africana, ni de España, que la fuerza del pueblo ecuatoguineano está en los pueblos de África, en los trabajadores y los pueblos de Europa o de América, decidimos proponer a todos los jóvenes, a los trabajadores y campesinos, a todos los partidos y organizaciones de Guinea Ecuatorial que dicen ser partidarios de la democracia, la lucha en unidad para la defensa de la siguiente plataforma:
Ruptura de los acuerdos con el FMI.
Establecimiento de relaciones de cooperación fraternal con todos los países, centroafricanos en particular, sobre la base de la igualdad, rechazando la opresión y la explotación.
Ruptura del Pacto Nacional Vinculante de 16 de marzo de 1993.
Abajo el Régimen de Obiang. Expropiación de sus propiedades y de su fortuna y de la de todos los altos dignatarios del Régimen.
Disolución del Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE), que se confunde e identifica con las instituciones del Régimen de Obiang.
Elecciones libres a una Asamblea Constituyente que decrete:
Plenas libertades democráticas:
Amnistía para todos los presos políticos, total libertad de asociación y de expresión, plenas libertades sindicales y políticas, derecho a la negociación colectiva. Cumplimiento efectivo de los convenios 87, sobre Libertad Sindical, y 98, sobre Negociación Colectiva, de la OIT, ratificados por el Gobierno de Guinea Ecuatorial en agosto de 2001. A igual trabajo, igual salario.
Soberanía de Guinea Ecuatorial: los recursos naturales son propiedad del pueblo. Expropiación sin indemnización de las multinacionales del petróleo. Los yacimientos de Alba, Zafiro y Ceiba deben ser propiedad estatal.
La tierra debe ser puesta a producir para no depender de la importación de alimentos de Camerún y Gabón, para proporcionar los alimentos necesarios a la población. La tierra para el que la trabaja.
Servicios públicos para todos: los beneficios procedentes de la gestión democrática de las riquezas nacionales estatalizadas proporcionarán: derecho a una pensión de jubilación y al subsidio de desempleo; sanidad y enseñanza públicas y gratuitas, electricidad y agua corriente en todas las casas; infraestructuras que fomenten el desarrollo económico de Guinea Ecuatorial y el bienestar de sus ciudadanos, y no los beneficios de las multinacionales y de las empresas de Obiang y su familia, mientras se arruina y endeuda al país.
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ResponderEliminarInteresante el manifiesto. Podeis contar con mi apoyo aunque no este ahi con vostros y entiendo vuestra voluntad de mantenerse en la clandestinidad.
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